La maldición de la guerra
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La maldición de la guerra construida sobre la mentira.
La maldición de la guerra inteligente y los efectos colaterales.
La maldición de la guerra como tributo a un dios sanguinario y perverso.
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La maldición de la guerra que pagan siempre los inocentes. Los santos inocentes en fila cayendo al abismo: uno, dos, cien, mil, cien mil.
La maldición de la guerra disfrazada de guerra justa, cuando todos saben de sobra que no hay guerras justas.
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La maldición de la guerra para llenar los cementerios.
La maldición de la guerra que nos convierte en malditos.
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La maldición de la guerra de los ricos contra los pobres.
La maldición de la guerra de la ambición sin límites.
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La maldición de la guerra que apesta a islamofobia.
La maldición de la guerra que traerá más guerras y más guerras y más guerras.
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La maldición de la guerra que hará estallar más odio.
La maldición de la guerra, la abolición de la razón.
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La maldición de la guerra que abrirá miles de tumbas.
La maldición de la guerra para volver a la noche de los tiempos.
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La maldición de la guerra para alimentar la ambición sin límites, los intereses espurios, las conciencias derrotadas.
La eterna maldición de la maldita guerra eterna.
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Qué triste para un autor —y para todos— volver a publicar una entrada antigua porque nada ha cambiado.
La letra es nueva…